17/12/2022

Por la vida, el diálogo y la paz

Por la vida, el diálogo y la paz

Frente a los dolorosos hechos de los últimos días, la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) se dirige a la comunidad nacional para expresar lo siguiente:

1. Lamentamos profundamente la muerte de compatriotas en el contexto de las recientes movilizaciones sociales. Es imprescindible garantizar el derecho a la vida, desterrar la violencia y el vandalismo contra la propiedad privada y pública. La defensa de la vida es un principio elemental de convivencia. La violencia socava la esperanza de construir un proyecto que integre a todos los peruanos sin distinción.

2. Invocamos al Poder ejecutivo y al Congreso a deponer sus posiciones ideológicas y sus intereses inmediatos. Por el bien del país, deben abocarse, con prontitud y desprendimiento, a encontrar una ruta consensuada que permita resolver  la actual crisis política y social. El diálogo es esencial para una sana vida democrática.

3. Las recientes propuestas de la Conferencia Episcopal Peruana, de la Defensoría del Pueblo, de los gobiernos regionales, de algunos gremios empresariales, asociaciones civiles y de distintas fuerzas democráticas evidencian la extendida y firme voluntad de encaminar al Perú en la senda del desarrollo, de la inclusión y de una cultura de paz que fortalezca nuestra inestable democracia.

4. Exhortamos a las fuerzas políticas y a la sociedad en general a desterrar la polarización , la corrupción y toda gestión de intereses particulares en la esfera pública. En el futuro próximo, urge que nos esforcemos por lograr una representación nacional cuyos objetivos primordiales sean consolidar la democracia, garantizar derechos básicos como salud y educación de calidad, defender los derechos humanos y actuar a favor del bien común. El futuro del país depende de lo que hagamos hoy.

A pesar del difícil momento que atravesamos, podemos construir juntos un país mejor. Requerimos desprendimiento y saber escuchar. Hoy más que nunca debemos defender la paz, el diálogo y la vida. Las próximas generaciones tienen derecho a vivir en una sociedad integrada, democrática y sana. Nosotros tenemos el deber de asegurarlo. No les fallemos nuevamente.

Lima, 17 de diciembre de 2022